Y es que de todos es sabida la obsesión de los hombres por los pechos femeninos. Es algo que llevamos dentro todos los hombres, Es una especie de atracción instintiva que hace que un hombre ante un escote prominente pierda totalmente el sentido y la noción del tiempo. Porque a los hombres nos gustan todas, es una atracción fatal, sin explicación lógica, aunque muchos intentan buscársela.
¡ Cuántos accidentes de coche se podrían haber evitado si aquella chica hubiese llevado un vestido menos escotado...!