NOCHE DE SEXO SALVAJE



















Las imprudencias no tienen que ver con las edades, sino con los hábitos, no son los más vulnerables los más jovenes por ser jovenes, sino por ser más fogosos, y es que el instinto y las hormonas mandan sobre el pobre intelecto humano por mucho que nos empeñemos, y aquel que no ha podido disfrutar de una vida sexual plena y fogosa ,puede encontrarse de repente como carpanta en un banquete nupcial, y lanzarse a un atracón de sexo salvaje y descontrolado,ya que el hambre atrasada nos puede hacer perder la cabeza; así que no se sorprendan si ven que sus hijos o maridos camuflan las pastillas de la tos, junto a unas azules muy sospechosas de dudosa procedencia.

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